sábado, diciembre 21, 2024
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JULIÁN PALLAROLA, 20 AÑOS DE DOBLE TEMPORADA EN MASELLA Y CATEDRAL

El profesor de la escuela de esquí de Masella Fernando Luis Julián Pallarola hace veinte años que no vive ningún verano. Hace doble temporada trabajando de profesor de esquí en Masella y Cerro Catedral, en su Argentina natal. Iván Sanz, de la web especializada en deportes de invierno Diaridelaneu.cat le ha entrevistado para su medio y nos cede la pieza para que nosotros la compartimos. Gracias, Ivan, por cedernos la entrevista y buen invierno, Julián!

(Entrevista publicada en el Diari de la Neu, el 05 de mayo de 2018).

Fernando Luis Julián Pallarola es uno de los tantos argentinos que cada año cruza el océano atlántico para hacer la doble temporada como profesor de esquí. Cuando es invierno en el hemisferio Norte trabaja en el Pirineo, y cuando llega el invierno en el hemisferio sur se traslada a los Andes. Desea saber cómo lo vive?

Nacido en Buenos Aires, Argentina (22-06-1959), iba desde pequeño a San Carlos de Bariloche, en la Patagonia argentina, donde tenía familia. Como cerca de la ciudad se encuentra la estación de esquí de Cerro Catedral, cuando cumplió los 19 años le vinieron las ganas de calzarse unos esquís. Así fue como se introdujo en el mundo de la nieve, primero como un turista más, y más adelante como un profesional de la enseñanza.

Cuando hizo 26 años dejó Buenos Aires, donde combinaba el trabajo de arquitecto y de responsable en un almacén de material de construcción, y se instaló en Bariloche. Cinco años después comenzaba a trabajar como monitor a tiempo parcial en un club de esquí de la ciudad. Actualmente hace la doble temporada como profesor de esquí, entre el Pirineo y los Andes. Como curiosidad, su abuela era originaria de Tuixent y se trasladó a vivir a la Pampa argentina. Años después su nieto ha hecho el camino a la inversa para trabajar no tan lejos del pueblo natal de su abuela.

– Por que y cuando empezaste a trabajar de profesor de esquí?
– Pues empecé a mis 33 años. Empecé en Cerro Catedral, en Argentina, donde me saqué la titulación. En Buenos Aires tenía un negocio que no me funcionó y decidí dejarlo para dedicarme al mundo del esquí, donde vi más posibilidades y me gustaba.

– Es difícil quitarse la titulación de profesor de esquí en Argentina?
– Yo pienso que sí, primero porque los grandes centros de esquí quedan muy lejos de las grandes ciudades del país. Esto significa que tienes que marchar de donde vives, a 1.200 o 1.500 kilómetros del centro de esquí, pagarte los forfaits y el equipo y mientras tanto mantenerte mientras dura la formación.

– Aparte de esquí alpino también impartes clase de otras modalidades? Tales como snowboard, telemark …
– No, porque tiendes a especializarte en una modalidad y en mi caso, y el de la mayoría de profesores argentinos, es la de esquí alpino. Sí que hay que abordan diversas disciplinas, y de hecho esta es la tendencia en los nuevos profesores, pero no en mi caso. Además, que cada especialidad requiere su titulación y conseguirlos no son para nada económicos.

– ¿Cuándo empezaste a hacer la doble temporada?
– Pues empecé cuando tenía 38, sería en 1998. Tenía un amigo de Bariloche que fue quien me recomendó que venir a la escuela del Llívia. Él ya trabajaba y coincidió que ese año no podía ir. Me presenté y enseguida me aceptaron. Diez años después ya empecé a trabajar en la escuela de esquí de Masella.

– Así siempre has trabajado entre Catedral y Masella?
– No, porque cuando estaba en el Club de Llívia visitábamos varias estaciones, sobre todo las de los Angles, Portè-Puymorens, Formigueres, Font Romeu, Espace Cambre d’Aze e, incluso, Puigmal antes de que cerraran. También un par de veces en Andorra, pero fueron visitas puntuales.

– En Argentina siempre has ejercido y esquiado en Cerro Catedral?
– No, también estuve en Chapelco. Una estación más pequeña que Catedral pero muy bonita y muy cuidada.

– ¿Cuáles consideras que son las grandes diferencias entre Masella y Catedral?
– Hay varias cosas, pero la más importante es que comercialmente las temporadas en Argentina son muy cortas. Normalmente comienzan a mediados de junio pero el más fuerte en clientes y nieve es a partir del 15 de julio. Y a mediados de septiembre ya se acaba la temporada. Difícilmente se llega a octubre, aunque en alguna ocasión recuerdo haber terminado el 8 de octubre.
La segunda gran diferencia es que cerca de la estación no hay ciudades, o sólo hay una, San Carlos de Bariloche, que debe tener 200.000 habitantes. Y ya no hay prácticamente ninguna ciudad importante hasta más de 600 kilómetros, Neuquén. En cambio, muy cerca de Masella, a 100 kilómetros, ya tienes una ciudad como Manresa de 75.000 habitantes, y 150 km, ya hay una urbe como es Barcelona, ​​con 2,5 millones de habitantes o más.
Para venir a esquiar a Catedral desde las grandes ciudades argentinas debes tomar, muy posiblemente, un avión, y esto hace que el esquí en Argentina termine convirtiéndose en una actividad no elitista pero si exquisita.
Y finalmente comentar que a Catedral no hay nieve producida, sólo en las zonas bajas de la montaña, y estos cañones no tienen la función de completar pistas enteras, sino que están ubicados en zonas de debutantes o quizás en un punto muy concreto que siempre sufre por falta de nieve.

– Hay muchos monitores que está haciendo doble temporada en Masella?
– No, en la escuela de Masella sólo estoy yo. También hay un chico que viene con un club a entrenar. Tengo que decir que la mayoría de profesores que hacen la doble temporada se van a Andorra. Algunos también optan por ir a estaciones de los Alpes.

– ¿Qué condicionantes supone hacer la doble temporada?
– Si eres una persona con obligaciones familiares, difícilmente vas a hacer doble temporada. En mi caso trabajo unos 8 meses como profesor, 5 en la Cerdanya y poco más de 3 a Bariloche, tengo que intentar reservar los meses en medio para visitar a la familia y procurar no tener demasiados gastos, ya que difícilmente trabajas en ninguna otra actividad. Son meses o semanas que aprovechas para descansar y ahorrar. Todo ello significa que económicamente debes vigilar con los gastos y se hace difícil porque entre temporada y temporada difícilmente puedes trabajar.

– Recomendarías los esquiadores de Masella visitar Argentina, y Catedral en concreto para ir a esquiar?
– Pues sí. Pienso que para quien vaya será una experiencia bonita y muy provechosa, ahora bien, no es comparable un lugar con el otro, por todo lo que he explicado antes. Yo considero que es una experiencia que les será inolvidable, no sólo para el esquí, sino porque Bariloche es un lugar de la Patagonia Argentina maravilloso, espectacular.

CUESTIONES PERSONALES

– ¿Cuándo y dónde empezaste a esquiar?
– En el Cerro Catedral, a los 19 años.

– ¿Cuál es tu estación de referencia?
– Para mí lo es Masella, donde además he recibido siempre muy buen trato y me siento realmente como en casa.

– ¿Cuáles son tus pistas preferidas en Catedral y en Masella?
– En Masella la Davallada y en Catedral, la Intermedia. Las dos rojas.

– ¿Qué te molesta más para esquiar: el viento o la niebla?
– El viento.

– ¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo y lo que menos?
– Lo que más me gusta es la satisfacción de enseñar. Ver comenzar personas que no saben nada, y que tal vez les está costando mucho y que finalmente 4 días después ya esté esquiando por pistas es una satisfacción impagable.
Lo que menos? Supongo que el clima. Hay días en que aunque esté lloviendo tienes que salir a dar clases sí o sí. Y ya puestos, pienso que esto de la doble temporada y lo que implica tener que hacer mudanza de trastos también es un tema que no me gusta demasiado y que conlleva cierto desarraigo.